martes, 19 de octubre de 2010

Latidos



















Y corria...
Corria y corria y corria

No queria parar.

El camino variaba, habia arena, por lo tanto hacia mas esfuerzo.

Luego tierra, iba mas rápido, pero dolía mas.

Siguió corriendo.

El camino cambió a cemento, ya ardían sus pies descalzos, pero siguio haciendolo, se le hacía facil.

Luego eran Adoquines, se le hizo difícil...sus pies ardían, y resbalaba, los adoquines estaban sueltos.

Las paredes se comenzaban a cerrar.

Y con una agonía inmensa siguió corriendo.

De repente se detuvo.

Caminaba realizando el sonido de dos corcheas unidas.

agonía...

Repentinamente el ambiente se volvió con olor a frutillas, todo rojo, Tan Rojo, que le ardían los ojos.
Se tuvo que colocar una venda en los ojos, era raro... le gustaba, era osado y nuevo, le sacaba de su rutina.

Y volvió a correr, pero esta vez feliz.

Quería descansar, pero no podía, no sabia porqué.

Volvió a caminar

Su rutina cambio completamente, después volvió a correr por días y días agonicamente, luego volvió a caminar, tranquilamente, para luego volver a correr pero de una manera mucho mas feliz :) corría en frutillas, como él decía, feliz y con los ojos vendados.

Así se llevo su vida entera.

Quizá para usted sea aburrido, pero para él en cambio, no lo es.
Aunque no nos demos cuenta, el también sufrió, pero como lo paso mal, también lo paso bien.
A nosotros nos pasa lo mismo, solo que no nos damos cuenta.

El que corría se llamaba Corazón, y prefería correr a ciegas, aunque no dependiera de él. 
El corazón no elige, solo corre cuando le toca, y cuando le toca, esta con los ojos vendados.

El corazón aun es un misterio, tanto como amar.

"Y todo este tiempo se trataba de los ojos."

1 comentario:

  1. amar, amar, amar (lo complicado), amar, amar, amar (lo básico), amar, amar, amar (lo infinito).

    No me gusta caminar sola :)

    ResponderEliminar